Horas con lágrimas

¿Qué es una lágrima?

Entre hoy y ayer tuve unas horas muy melancólicas. Ellas brotaban, el momento llegó y yo simplemente me deje llevar. Ellas brotaban mientras yo sentía nudos en la garganta, pensaba y daba vueltas en la cabeza. Ellas brotaban y yo no les ponía trabas... las dejaba fluir.

Y empezo a brotar... no brotaban de tristeza sino de realidad. Brotan porque tienen que salir. Para ellas no hay cadenas, salen cuando tienen que salir. Son ligeras como el agua.
No salen todos los días, salen solo cuando aprendes en ocasiones especiales. Ellas son mi visión a lo sensible, a los momentos que tengo.

Simplemente salieron, ellas no tienen que pedir permiso. Ellas salen y me enseñan mucho a la hora de salir. Me pesan los parpados escribiendo estas lineas y la verdad es que estoy llorando aun escribiendo y blogeando.

No me siento mal, lloro por realidad. Lloro porque extraño mucho, así mucho a mi madre. No tengo verguenza para decir que estoy con nudos en la garganta y tengo el valor para decirte esto porque yo me considero un payaso. Lloro por dentro y mucho porque extraño, tengo sentimientos y seguro te dará melancolía y brotaran tambien en tu ser. Si llegas a llorar, pues llora pero no quiero que llores de pena por lo que te diga, llora porque con eso te das cuenta que tienes sensibilidad y sentimientos guardados.

Lloro también por mi padre, el que mas apuesta por mi futuro. Esperaba la madrugada para poder escribir esto, para encontrarme con mi escencia, con el yo interno que soporta toda mi inmadurez y maneja mi cuerpo para bien.

Recuerdos vienen a mi mente, hace tiempo que no estoy asi. Me dirán que me voy a arrugar y no me importa, facil y arrugado tengo mejor look. Llorar no es malo, llorar es abrir tu mente, recordar tu pasado, tu escencial infancia la que llevaba en si la grata y maravillosa inocencia.

Diria que ya no puedo escribir mas, no llores por pena, llora por realidad y mejora. La vida no te impide llorar, llorar es bueno de vez en cuando. Es un deber ser feliz y parte de ella es llorar, reír y no amargar. Sonrie a la persona que tengas al lado y dile cuanto la quieres, abrazala porque cada momento es único.

Si me conoces o no, te quiero decir algo aunque me cueste demostrarselo a mis padres: TE QUIERO.

Gracias por ser persona, por leerme y no, no me llenes de halagos ni me juzgues... solamente sonrieme y permiteme ver por un segundo tus ojos, sentir tus manos y que mi sonido armoniozo llegue a tus timpanos y estos hagan eco en tu cuerpo por un "gracias" de mi parte.

Gracias Dios, ojala llegue a los 120. 

No, no llores por pena, llora por la realidad y de ella aprende. Sonrie todos los días pues nunca vuelve a existir la misma atmosfera.

Y gracias a mi mamá y a mi papá por darme la vida. Y por apostar por mi aunque ya no los tenga juntos.